A eso de las cinco de la mañana nos montamos en el coche de Samu, Iván, Javi y yo (Capi) para desplazarnos a Cuenca. Somos los integrantes del Bikilamanjaro que vamos a participar en la distancia maratón. Bueno, falta Arturo que nos espera allí ya que se ha ido a pasar el fin de semana.
El resto del equipo que va a participar en la media maratón, Marcos, Txule, Antonio López, Antonio XXL, Victor y Javi saldrán una hora más tarde.
Hoy el chofer es Samu. El viaje se pasa volando entre charlas terminadas casi siempre en risas, je je je...
Llegamos allí a buena hora para tomarnos un cafetito y esperar a Arturo que nos ha recogido los dorsales. Aquí se nos une Julián morcillo, un crack en esto de la montaña que junto a nuestro compañero Iván seguro que saldrán a ponérselo difícil a los primeros.
Ya estamos todos y Arturo nos ha dado los dorsales. Ha venido con su hermano David que seguro que nos va a estar animando en algún avituallamiento.
Procedemos a cambiarnos. Hace mucho frío pero suponemos que a medida que pase la mañana irán subiendo las temperaturas lo que hace dudar en que ponernos. Cada uno se acicala como cree conveniente y así nos dirigimos a la línea de salida. Allí me encuentro a Loreto y a Carlos con los que charlo un rato. También saludo al Santa. un colega de Toledo que vive en Cuenca y le da tieso a esto de la montaña.
Sin mucha demora se da la salida a la carrera y después de dar una vuelta al parque cogemos la carretera que nos llevará a la primera de las subidas que nos espera hoy.
Comenzamos tranquilitos ya que nos lo queremos tomar como un entreno para el desafío calar del río mundo del 2 de abril. Hace bastante frío y en los avituallamientos los voluntarios están abrigados hasta las pestañas. Yo de momento no voy mal. Me he puesto una camiseta térmica debajo de la del equipo que junto con los manguitos, guantes y buff parece que voy manteniendo la temperatura.
Los primeros kilómetros están siendo bastante animados entre chistes, cánticos y alguna anécdota que otra. Vamos los cuatro juntitos lo que se hace más llevadero.
En el avituallamiento del kilómetro 18 nos paramos a beber y comer. Allí está David esperándonos para darnos unos pocos de ánimos. Nos hacemos un par de fotos con él y comenzamos la bajada hacia el cauce del río. En esta bajada David se arranca y se une al grupo. Al final se engancha a esto de la montaña, je je je.
A mitad de la bajada ya nos comenzamos a cruzar con los de la media maratón que están ya de vuelta hacia la meta. Aquí Javi busca sitio para soltar lastre y Samu nos dice a Arturo y a mí que tiremos que él se queda con Javi.
Bueno pues nos despedimos de ellos y nos lanzamos para abajo. Arturo va delante y me pregunta de vez en cuando que como va mi pié. En el km 15 me le torcí pero bien y parece que mientras va caliente no molesta demasiado aunque tengo que ir pisando lo mas plano posible, cosa muy difícil.
Hemos pasado las tres horas de carrera. El sol va haciendo acto de presencia y la temperatura comienza a subir. En las zonas donde no da el sol sigue haciendo muchísimo frío, pero en cuanto subimos y nos da de lleno notamos que nos sobra algo de ropa.
Nuestros compis de la media supongo que estarán disfrutando tanto como nosotros. No se por que me da que no me voy a equivocar, je je je.
Llegamos al avituallamiento del 23 donde paramos a rellenar bidones y comer algo de fruta. Aquí está el presidente de la federación de montaña que reconoce el equipo. Charlamos un rato con él y despidiéndonos comenzamos una larga subida entre pinos que nos va a poner las piernas tiesas...
Poco a poco se hace el camino. En la subida nos da tiempo para comentar alguna cosilla sobre esto del correr y como es normal, todo lo que sube baja así que......
Pasamos por lo alto de una zona residencial que vamos dejando a la izquierda. Aquí le digo a Arturo que no me suena esta parte del año pasado. Nos han dicho que ha cambiado algo el recorrido respecto al año pasado y creo que es esta parte.
Efectivamente esto es nuevo para nosotros. Nos damos cuenta al llegar al Cristo que está en lo alto de Cuenca. Antes se llegaba a él por otro lado. Aquí hay otro avituallamiento y hay gominolas, yujuuuuuuu.....
Después de reponer azúcar comenzamos una fuerte bajada hacia Cuenca. Al llegar abajo nos espera una última bajada por una piedra casi lisa en la que hay colocadas dos cuerda para bajar. Arturo por una y yo por la otra bajamos casi sincronizados. Pisamos tierra firme y cruzamos el rio para comenzar el camino de regreso.
Pasamos por la zona donde nos cruzamos hace unas horas con los de la media. Nos toca subir escalones haciendo ni se sabe cuantos zig zag. Hay turistas haciendo fotos y algunos nos animan a su paso.
Después de la subida toca la bajada..... Cruzamos el puente y a partir de ahí unos siete kilómetros para rematar la faena. Los primeros kilómetros son bastante corribles y adelantamos a numerosos corredores.
Comenzamos una subida, que creo que es la última. Vamos regulando que las horas de viaje se van notando en las piernas. Ahora mismo tenemos el Lorenzo en todo lo alto y nos está pegando de lleno. Nos pensamos hasta en quitar la camiseta térmica que llevamos debajo pero decidimos que queda poco y que seguimos como estamos.
Arturo me pregunta varias veces por mi tobillo. la verdad es que me molesta bastante y tengo que ir buscando pisar plano para no doblarle mas de la cuenta, aunque me va dejando correr.
Por fin llegamos al km 40 que está en la cima. Solo queda una última bajada bastante puñetera donde las uñas se clavan en la zapatilla, je je je.
Por fin llegamos a la carretera que nos da paso al puente de cristal. Esto está finiquitado. Nos queda la entrada a meta.
A 100 metros de la meta están nuestros compis que han participado en la media esperándonos para
aplaudir nuestra entrada. Los saludamos mientras les chocamos las manos. Gracias compis, eso te da un subidón de los buenos.
Tenemos el arco de meta a la vista. le choco la mano a Arturo, mi compañero de viaje y cruzamos el arco en 6:21´. Hemos sufrido pero nos lo hemos pasado como enanos.
David, el hermano de Arturo nos está esperando y nos hace una foto a la entrada de meta.
Bueno pues después de una mañana de "trekin", toca irse a comer algo así que al coche y a llenar la tripa.
Hasta la próxima donde intentaremos derrotar las montañas de Riopar.
Capi
