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domingo, 24 de octubre de 2021

Maratón de montaña de Cuenca.

   Este si que es juguetón. Menudo maratón que vamos a disputar. Un recorrido de 43 km con 2700 metros positivos donde no hay grandes subidas, pero si cortas y duras. Siempre subiendo y bajando. Muy poco llano para poder estirar patas y soltar músculos. Pero bueno, cada maratón es diferente y vamos a ver que tal se nos da.

  Susana viene como casi siempre con bastantes nervios aunque luego en carrera se le van quitando poco a poco. Decidimos irnos a dormir a Cuenca para no tener que pegarnos el madrugón el día de la carrera. Así, el Sábado por la tarde estamos recogiendo el dorsal en el sitio indicado.


  La recogida es rápida y la bolsa del corredor con camiseta y mochila. Aprovechando que es en un centro comercial, decidimos cenar algo allí mismo y así ir al hotel con todo hecho. Bueno con casi todo, ja ja ja.

  En la recogida saludamos a varios amigos que también vienen a meterse el tute mañanero. Charlamos un poco con Basalo al que hoy se le va a hacer corto esto, je je je.

  Ya en el hotel, solo queda preparar todo e irse a dormir para estar lo mas descansados para mañana, que lo vamos a necesitar.

  A las 06:00 suena el despertador. Tenemos una hora y media de margen hasta que comience la prueba que es a las 07:30. Este año la salida cambia de ubicación. La universidad es la zona fijada por la organización. Nosotros estamos a unos 7 minutos en coche, así que tenemos tiempo para, después de dejar el hotel, parar en un bar y tomarnos un cafetito calentito que hoy la mañana está fresca. El termómetro marca 4º C. 

  A falta de media horita, estamos aparcando el coche justo delante de otro que si no me equivoco es de nuestro compañero Iván. Efectivamente, al rato llega Iván que viene de recoger el dorsal. Mientras nos acicalamos (como me gusta este palabrejo), charlamos un poco y nos ponemos al día que hace mucho que no coincidimos.

  También vemos a Jorge por allí. Comienza a aparecer el elenco de buenos corredores y mejores personas y compañeros. Mientras charlamos, terminamos de prepararnos y comenzamos a ir hacia la salida. 

  En la zona de comienzo de la carrera, nos juntamos todos los  Bikilamanajaros  para saludarnos y hacernos una foto nocturna para el recuerdo. Iván, Vito, Arturo, Mariano, Susana y yo. Todos con el frontal apunto para disputar este maratón.


 Quedan pocos minutos para la cuenta atrás. Hace bastante frio así que todos bien abrigaditos y esperando que vayan subiendo las temperaturas poco a poco y pasemos una mañana genial.

  Comienza la cuenta atrás. Nuestros compis se han ido hacia adelante para darle estopa y Susana y yo junto con Arturo, nos quedamos en la parte trasera. Y por fin llega el 0 de la cuenta atrás. Play al reloj y a comenzar a correr. Tranquilos que  empezamos en subida, ja ja ja.

  Junto con Arturo, que no tardará en irse hacia adelante, comenzamos la primera de las muchas subidas que tenemos hoy por delante. Siguiendo el circulo que lanza nuestro frontal, hacemos la bajada por el bosquecillo. Muy muy entretenida, pero donde tenemos que llevar cuidado por que aunque la luz que llevamos es potente, no se hace igual que de día.




   Ya sabemos de otros años, que hay que cuidar cuádriceps que las continúas bajadas y subidas, van cargándolos y al final, nos pueden dar alguna sorpresita. Importantísimo la hidratación y las sales. 

 En el km 6 tenemos un avituallamiento. Los bidones van casi llenos así que comemos un poco de fruta y algo de chocolate y a seguir.




  Ya empieza a amanecer y no tardamos en guardar los frontales. También tardaremos poco en quitarnos el cortavientos que el cuerpo está bastante caliente ya. Pero todavía hace fresco y en las bajadas merece la pena llevarlo. Aunque se va a calentar un poco más, con una de las subidas con mas desnivel de la carrera. Bastante dura en un primer tramo, pero al llegar al mirador Jose Luis Coll, te das cuenta que ha sido un aperitivo. La subida a las antenas se las trae. Además es mucho mas técnica de la que acabamos de hacer.



  Susana lleva buenas piernas y junto a otro grupete, vamos sumando metros al desnivel positivo. Ya en las antenas, cogemos energías y bebemos en el avituallamiento.

  Toca soltar patas en la bajada que nos llevará directos al mirador Cuenca, situado en el parking del Castillo. Por aquí pasamos en el km 8 y pico, y los voluntarios se despiden de nosotros con un "hasta luego". Por este punto volveremos a pasar en el km 23. 

  Sin perder de vista la toma de sales, comenzamos la bajada hacía la carretera, por un zig zag de piedra muy chulo que nos da acceso por una puerta también de piedra, a la senda muy amena y divertida donde vamos sumando metros negativos para llegar a la carretera y presentarnos en el auditorio. 

  Aquí tenemos la subida por unas lanchas de piedra. Unos años se hace de bajada y otros de subida. Pues hoy nos toca de subida, así que a coger la cuerda y apretar el culo para arriba.




    Dejo subir a Susana la primera para poder hacerla alguna foto en este tramito diferente. Hay que tirar de brazos un poco, pero bueno, tampoco tiene una dificultad muy grande.

   De aquí directos al mirador del cerro del Socorro. Todo en subida donde cuanto mas se coge altura, mas se empina la cosa, je je je. Bueno, hoy se trata de ir quitándose uno a uno todos los repechos que tenemos.




 De momento vamos de lujo. Llevamos algo más de 10 km. Tranquilos que tenemos mucha tela que cortar todavía.

   Después de la bajada del Socorro, tenemos unos nueve kilómetros por los cerros alejados de Cuenca, donde se puede correr algo aunque sus continuos sube y bajas van haciendo pupita. Además, también tenemos una laaaarga subida en el km 16 que nos hace bajar el ritmo bastante.

  Bajadita chula por una vereda. Pero cuidadín que hay mucha piedra y un tropezón te lleva al rio de cabeza. A mitad de esta bajada, nos unimos a los de la media  que nos vienen por nuestra izquierda. Un poco de compañía no nos va a venir mal.

  Y delante nuestra se nos presenta un percance. Un corredor está tumbado en el suelo con una marta térmica abrigándole. Al llegar a su altura nos damos cuenta que es nuestro compañero Javi. Se ha caído y se ha dado un golpe en el hombro y en la cabeza. Allí están Casado y Sierra, otros compañeros de equipo, que están cuidando de él hasta que lleguen los sanitarios que no tardarán. 

  Hablamos un poco con Javi y nos dice que se encuentra bien. Casado y Sierra nos corroboran que en principio solo ha sido el golpe. Después de quedarnos un poco más tranquilos, nos despedimos de ellos por que además es una zona muy estrecha y estamos estorbando a los demás corredores. 

  Pues nada, con el susto en el cuerpo continuamos Susana y yo la bajada junto con los de la media. Algunos nos preguntan que cuantos kilómetros llevamos. Pues ahora mismo, más de los que vais a hacer vosotros, ja ja ja. Todos nos dan muchos ánimos. Bueno, casi todos los ánimos se los dan a Susana y eso nos hace venirnos un poco arriba.

  Ya en el pueblo, bajamos por la carretera hasta el auditórium de nuevo, dejando el puente de San Pablo a la derecha. Puente por el que hemos cruzado en todas las ediciones y que hoy está cerrado temporalmente.

  Este tramo le continuamos compartiendo con los de la media lo que hace que vayamos con bastante acompañamiento. Cosa que se agradece. Y además es el mismo que hicimos hace muchos kilómetros. De nuevo tenemos que ir al parquin del castillo. Donde los voluntarios nos dijeron :"hasta luego".

  Unos dos kilómetros donde tenemos el tramo de escaleras tan empinado, pero muy bonito a la vez. Susana va charlando con varias corredoras mientras vamos llegando al parquin. 

  De nuevo el avituallamiento. Aquí nuestros acompañantes temporales, nos dejan solos de nuevo. Volvemos a llenar reservas y a tomarnos un mini descansito. llevamos 23 km más o menos. Ya solo nos quedan 20. Que parecen pocos, pero que a estas alturas y con el desnivel que llevamos, sabemos que se van a hacer muy largos.  Pero bueno, hemos venido a terminarla y si no pasa nada, lo haremos. 

  Salimos del avituallamiento y bajamos por la carretera hasta un zig zag de piedra que nos deja en las hoces de Cuenca. A partir de aquí, por vereda y por el margen derecho del rio Júcar, tenemos unos 8 km hasta que crucemos al otro margen y regresemos de nuevo a Cuenca.

  En esta vereda, Susana empieza a tener retortijones y tiene que parar varias veces a soltar lastre. Creemos que le ha sentado algo mal. Esperemos que sea momentáneo por que si no va a hacer mas duro de la cuenta este final.





  Poco a poco vamos comiéndonos los km. Corremos lo que podemos por que esta vereda no es llana precisamente. Y así llegamos al km 31. Susana con un poco de dolor de tripa que de momento va aguantando. Aquí, llegamos a la carretera CM-2104 donde tenemos un avituallamiento. 

  Paramos un poquito para descansar de este último tirón. Allí charlamos un poco con los voluntarios que nos dicen que vamos justos de tiempo. Bueno, tenemos tiempo de sobra. nos quedan 9 km, con tres o cuatro repechos duros, pero nada que no se pueda superar.

  Cruzamos el puente del rio y pasamos al otro margen del Júcar. Ahora si que ya no hay mas tu tía. Hay que volver a Cuenca si o si. Y después de un primer repecho, comenzamos el regreso.

  Susana tiene que parar varia veces más. Cada vez que come tiene que parar, así que de momento vamos a ir con líquidos que eso si que le admite. Pero al paso de los km se va quedando sin fuerzas. las piernas le van de maravilla, pero el no comer la está dejando sin energías.

  Hace un par de kilómetros, se nos ha pegado el escoba. Un chaval que no deja de darnos ánimos y de decirnos que vamos muy bien. La verdad es que a Susana la vienen muy bien esas palabras, por que solo piensa en que no vamos a llegar a tiempo.

  Pero el cuerpo cada vez le va flojeando más. En varias ocasiones me dice que no va a poder. Se la saltan las lágrimas de la impotencia. Solo me queda darla muchos ánimos y decirla que no hay prisa. Despacito y hasta donde lleguemos, que no tenemos que dar cuentas a nadie.

  Y así llegamos al avituallamiento del km 38. Todos nos animan. Susana tiene muchas dudas, pero es muy luchadora y muy dura y después de un pequeño respiro, salimos de allí dispuestos a llegar a meta.

  Poco a poco y con los ánimos del escoba que sigue con nosotros, vamos dando cuenta de cada metro. Solo nos quedan tres para llegar a Cuenca. En este tramo, al que yo le llamo el Viacrucis, no por otra cosa, si no por que hay un viacrucis en el camino, Susana parece que a pesar de la flojera y del dolor de tripa, de viene un poquito arriba y corremos bastante.

  Vamos Mon Amur, que nos queda como del puente a casa; ja ja ja. Distancias que hacemos diariamente y que viéndolo así, parecen mas cortas. Y...... por fin llegamos a la carretera. Pisamos Cuenca. Nos plantamos en el último avituallamiento. A falta de 2 km. ¡Pero que dos kilómetros!. Nos quedan dos repechos que te quitan el aliento.





  Vamos Susana que esto ya está hecho. El escoba avisa a meta de donde estamos y que ya salimos. Venga....Poco a poco vamos a ir subiendo el primer repecho. La verdad es que esto es una trampa, ja ja ja. Da miedo mirar hacia arriba. Aquí lo mas fácil, y lo mas seguro que se te monte algún músculo.

  Pasito a pasito, alcanzamos el final. Un parón rápido para coger aire y a soltar piernas en una bajada bastante pronunciada desde donde vemos el cortafuegos que nos queda. Este ya si que es el último. Ya no hay más. Venga Mon Amur que ya lo tienes. 






  Dándolo todo y apretando los dientes, nos comemos esta última subida. 2.700 metros positivos que se quedan atrás. Ahora sí, esto está hecho. Corremos hacia la meta. Dando lo último que le queda. Con la alegría de saber que lo ha luchado con todas sus fuerzas. Sabiendo que mañana se levantará con la medalla. Y sabiendo que ha merecido la pena no hacer caso a su cabeza en esas ocasiones que le decía :"déjalo".

  Grandísima Susana. Estoy super feliz y emocionado. Terminar esta carrera hoy va a ser un subidón. Como te dije en un momento de la carrera en el que lo pasaste peor, "poco a poco, que si lo dejas a falta de 5 km, mañana y siempre, te vas a arrepentir". No había prisa, no estabas mal físicamente. Solo había que ir pasito a paso, y lo has hecho.







  Entramos en la recta de meta y vemos al final el arco. Un pasillo de voluntarios y nos están esperando. El speaker nos anima por megafonía. Todos nos aplauden y gritan ánimos. Susana sonríe, me aprieta la mano con fuerza. Pasamos por el pasillo humano y entramos en meta como triunfadores. 



  "Lo has conseguido Susana". Hoy si  que lo has peleado, luchado y sufrido. Ahí esta tu medalla. Te la has ganado. Ah, y el besazo que te has llevado, claro.



  Pasados unos minutillos, se le juntan todas las emociones. El llanto de alegría, rabia, emoción..... es inevitable. Un llanto alegre. Un llanto de rabia por lo bien que iba y por las dificultades finales.  Muchas felicitaciones por parte de los que allí estaban. 



  Estate satisfecha y orgullosa de terminar una prueba durísima. Una prueba que ya no te cuentan. Enorme, Susana. Estoy super feliz.




  Les damos las gracias a todos los voluntarios y en especial al escoba que se ha portado de diez. Genial poder contar con gente así  en las carreras. Muchísimas gracias a todos. ha sido un día inolvidable y ha sido gracias a vosotros.

  Bueno, un poco mas tranquilos y después de descansar unos momentos, nos vamos a pegar un duchao, que el responsable del pabellón nos está esperando a nosotros para que no nos quedemos sin la deseada ducha. Muchas gracias también a él por que se ha quedado a esperarnos y ha dejado abierto para nosotros.



 Ufff, que mañana más intensa. Sabemos que si la tripa no la hubiera dado guerra, hubiéramos ido mucho mejor, claro está, pero no hubiéramos vivido este final tan impresionante e increíble. Todo tiene su lado positivo.

  Y así, con la medalla en el cuello, emprendemos el viaje de vuelta. Muchas cosas que comentar. Muchas cosas que analizar. Pero con la satisfacción de haberlo terminado.

  Nada más salir de Cuenca llamamos a nuestros compis para saber de Javi. Bueno, le han hecho pruebas y está todo correcto. Que tranquilidad también para todos. Un susto que se queda en eso.

 Esto ha sido lo que hemos vivido esta mañana de Domingo. Lo que nos tenía preparado el Mamocu. Nos vamos con la satisfacción de haber hecho una buena carrera y haber superado todos los contratiempos. 

  Poquito a poco se hace el camino, y en ello estamos. Nos vemos en la próxima....... Gracias a todos.


  Capi

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