Pues ha llegado el día de ver como ha evolucionado esta prueba. Hice la primera edición y la verdad que fue un poco desastrillo. Pero bueno, vamos a ver si en su quinta edición, que es la hace este año, es verdad lo que me llevan diciendo unos años. Que ha mejorado increíblemente y se esta superando año tras año.
Tempranito y después de salir de currar de noche, empalmo y me voy hacia Casillas. Una horita de trayecto en la que aprovecho para ir comerme un sándwich y un Colacao que me ha preparado Susana. Ese será mi desayuno de hoy.
Sin problemas de aparcamiento, me dirijo a por el dorsal a la plaza de España. Allí ya lo tienen todo montado ya que a las 05:30´ ha salido el ultra. Recojo el dorsal y me dirijo de nuevo hacia el coche. En el camino saludo a Oscar. Uno de los artífices de la carrera y que ya el año pasado me dijo que viniera.
Vamos a comprobar hoy como ha cambiado la cosa. Sitio, sierra y paisajes tienen para aburrir. Esto es un paraje increíble. Ahora vamos a intentar disfrutar de todo esto.
Me cambio mientras hablo un poco con Susana. Es temprano pero siempre está ahí para darme ánimos y hoy en especial se interesa por mi por haber salido de currar y venir directamente aquí. Veremos si no me duermo mientras corro, ja ja ja.
A las 07:15´estoy de nuevo en la plaza. Dentro de quince minutos se dará la salida. Somos unos 100 corredores los que nos hemos decantado por esta distancia, de las cuatro posibles.
Después de la cuenta atrás y con buena música, comenzamos otra aventura. Otra aventura-entrenamiento de cara a la Ehunmilak. Llevo metiendo km y carreras unas cinco semanas seguidas. Todo para acumular tiempo, desnivel y sobre todo para poner las piernas a punto. Aunque ya se van cargando bastante, hay que seguir un poquito más.
Los primeros pasos ya son de subida por las calles del pueblo. Y a partir de aquí, será un continúo subir y bajar. La verdad que hoy el día está espectacular. Me ha dicho Oscar que ayer estuvo toda la tarde lloviendo así que esperamos que todo este bastante mojado y embarrado. Como a mi me gusta, je je je.
Los primeros km ya te ponen los gemelos calentitos. Uff, que subidita nos han preparado. Según subimos ya me voy dando cuenta del espectacular sitio en el que estamos. Verdeas y trochas serán la tónica de la carrera. Sitios bastante técnicos e incomodos de correr. Pero desde allí arriba se divisan los pinares increíbles que tiene casillas.
Se me va pasando el tiempo volao. Las piernas van bastante cansadas. Es lo que tiene llevar toda la noche de pie, ja ja ja. Pero se que también esto me va a venir bien. Hacer los kilómetros con las piernas cargadas y simulando que voy por el km 100, ja ja ja.
Los avituallamientos están de lujo. Lo mas importante son las gominolas y las vamos a tener en casi todos. Así que otro punto positivo para la carrera.
Está el cielo muy encapotado. Hay mucha humedad y el terreno bastante mojado. Esperemos que la lluvia no haga su aparición, que me da mucha pereza sacar el chubasquero.
En el km 25 más o menos, después de otra subida algo mas llevadera que las primeras, tenemos un photo call. No dudo en hacer uso de él y así disfrutar también de estos momentos divertidos de la carrera.
A dos km tenemos un nuevo avituallamiento donde hago acopio de víveres. Un sándwich de Nocilla y fruta es lo elegido en esta ocasión.
Nueva subida hacia el Berrueco. Unos 400 positivos que ya van haciendo bastante daño. Aún así, como digo siempre, a eso hemos venido. Así que a disfrutar de estas cuestacas en este entorno tan increíble.
Muchos kilómetros por fuera de pista. Hay que seguir las balizas y las banderitas rojas que nos guiarán en el camino.
Bajamos al puerto de Casillas donde tenemos un avituallamiento de los buenos. Pasta, chocolate, fruta y demás manjares. Además tenemos la bolsa de vida. Lleno los bidones a tope y me llevo unas gominolas para el camino.
Tenemos un tramo en ascenso por una trocha bastante incomoda de correr. Peraltada, estrecha, llena de arbustos y helechos donde las piedras también te lo ponen un poco más difícil. Ahora, chulada de sitio como nada. Hay un color verde en toda la zona que derrocha vida. Después de estos meses tan secos y agonizando casi por falta de agua, estas lluvias son oro y la vegetación nos obsequia con estos colores. Que gusto ver correr el agua, ver todo mojado, ver vida en estado puro. Esto es maravilloso.
Estoy disfrutando tanto que hago una video llamada a Susana para enseñarla in situ las veredas y trochas del recorrido. Estos son los tramos que la gustan y hay que darla un poco de envidia. Je je je.
Y después de este tramito, comienzo la subida, para mí, mas dura de todas. La subida al vértice geodésico Casillas. También llamado alto del Mirlo.
Durísima subida, Precioso el terreno con zonas de barro, piornales y piedras con un desnivel bastante exigente. Entre algún piorno meto el pie y me lleno las zapas de agua y barro. Fresquita esta la cosa, je je je.
Al llegar arriba me topo con el vértice y no dudo en hacerme un selfi con el. Mucha niebla por aquí arriba. Rapidito me tiro para abajo donde coincido con un corredor que se ha saltado la baliza y venia sobre sus pasos.
Otra bajada muy interesante donde nos empieza a lloviznar un poco. Aún así aguanto un poco a ver si no va a más y no tengo que sacar el chubasquero.
Unos caballos sueltos por esta zona hacen este paraje, aún mas idílico de lo que es. Momentos para la vista que muy muy chulos.
Junto con el corredor de antes, llego al avituallamiento del km 40. Un poco de agua y sandia y continúo el descenso hacia Casillas. Pero antes hay que salvar varias subidas cortas pero intensas.
Largo descenso entre pinares, donde tenemos sitios bastante resbaladizos por estar el suelo muy mojado y con arena suelta. Pero seguimos disfrutando de esta zona y sobre todo de la naturaleza en estado puro.
En el km 44 me coge el segundo clasificado de la ultra. Le acompaño un poco en su camino hacia el pódium y charlamos un rato de la carrera. Creíamos que ya estábamos entrando al pueblo, pero una última subida nos hace bordear el pueblo para entrar por el lado contrario.
Y así, después de unos últimos dos km terminando de perder altura, nos plantamos en la carretera. Aquí ya corremos en suelo algo más firme, je je je, pero no tan espectacular.
A la entrada del pueblo me saluda German que luego irá a saludarme a la meta. Y por fin entro en la plaza cruzando el arco de meta por debajo de las 7 horas.
Increíble vuelta que nos han dado por toda esta zona. Un espectáculo para vista. Ha estado genial. Se han currado un recorrido duro pero increíblemente alucinante. Los voluntarios de 10, los avituallamientos geniales. Puedo ratificar que lo de hoy no tiene nada que ver a lo de hace cinco años. Esta parece otra carrera. Mejor dicho, es otra carrera. Un 10 para Casillas.
Ya en meta saludo a German y a varios toledanos que allí estaban. Foto de rigor haciendo una nueva muesca a la dentadura y a saludar a Carolina, Raúl y Ana. Un ratillo muy muy agradable que paso con ellos. Es un placer volver a gente tan buena que además hace tanto que no ves.
También veo un momentillo de nuevo a Oscar y le doy la enhorabuena. "Menudo carrerón nos habéis preparado" y "Vaya espectáculo de sierra tenéis", es lo que le digo. Simplemente espectacular. Volveré, seguro.
Y de aquí, a casita que creo que llego a la siesta, que falta me hace, je je je.
El 146 ha caído.
Capi
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