Menu de carreras de Capi

sábado, 11 de mayo de 2024

101 km de Ronda

    


   Otra vez me desplazo a mi antiguo destino. Otra vez a juntarme y volver a ver a mis viejos amigos y compañeros. Esta prueba es la escusa perfecta para seguir viéndonos. Aunque me tenga que meter 101 km entre pecho y espalda, ja ja ja.

    El viernes tempranito, junto al dueto formado por Iván y Cesar, ellos van a participar en la modalidad de BTT, me desplazo a Algatocín. Pueblo donde tenemos el alojamiento. Después del viaje y de comer algo en el hotel, nos vamos a Ronda a por los dorsales. 

   Todo super rápido y bien organizado. Allí me encuentro ya, con varios antiguos compañeros con los que charlo un rato. Después llegan las fotos de rigor en el photocall. 





  Con todos los tramites hechos, vamos a disfrutar de la feria del corredor, que este año está en un aparcamiento a un kilómetro mas o menos de la Alameda, que es donde está situada la meta. 


   Allí pasamos la tarde junto con otros compañeros de armas. Que buenas charletas y recuerdos salen de ese ratillo. Ya solo nos queda degustar la deliciosa cena que nos han preparado para coger fuerzas para mañana.



   Con el estomago lleno y bien hidratados, nos desplazamos de nuevo a Algatocín para preparar todo lo de mañana y dormir lo máximo que podamos que en unas horas tenemos faena, ja ja ja. Pero antes, tengo que desear mucha suerte a Inma. Mi sobrina. Hoy va a disputar la prueba por equipos. Una campeona que ya ha hecho unas pocas de la Legión y estando en el pódium en varias ocasiones. Mucha suerte para ti y tus compis. Seguro que lo vais a hacer genial. ¡¡Fuerza!!.


  Pues nada, el despertador ha sonado. Se pone en marcha la maquinaria en modo operativo. Bicis, zapas, mochila, cascos y demás enseres al coche. Con todo dentro, nos vamos para Ronda. Hay que desayunar bien y coger fuerzas para la tarea que tenemos entre manos. 

  Damos buena cuenta de unas tostadas con un cafelito. Últimos momentos para el baño y al lio. Cesar e Iván enganchan las bicis, se ponen de corto y se van hacia la salida. Yo también ya acicalado, me voy despacito y andando hacia el mismo sitio.

   Mucha suerte los deseo en esta prueba exigente. Importante que disfruten y sufran a partes iguales y que no tengan ningún percance destacable. Espero verlos en meta con la medalla colgada en el cuello. Muchísima suerte pareja. Lo tenéis en las piernas y lo más importante, os tenéis el uno al otro. Animo.

  Bueno, pues andandito para la salida. Allí veo a mis compis en la fila para entrar al campo de futbol. Hay un poco bastante jaleo. Los saludo y me voy hacia la fila de los corredores. Puff, creo que doy la vuelta a tres edificios. Aquí hay una liada muy gorga.

   Bueno, los corredores no avanzamos. Somos unos 5.500 participantes. Están dando prioridad a las bicis que son unas 3.500, pero a este ritmo no les va a dar tiempo a salir a la hora.

   Desde donde estoy yo, a unos 400 metros del control y sellado de la cartilla, veo y escucho como se va a dar la salida de las bicis. Ellos salen a las 8:45. Pues así es, se da la salida a la prueba ciclista. A mi lado muchos ciclistas que no han podido pasar por el control todavía. Pero es que detrás tengo a muchísimas mas todavía.

  Parece que comienzan a dar paso a los marchadores. Por fin llego al control y son las 09:20´. Nosotros salimos a y media. Pero es que todavía tengo bicis detrás. Estos van a salir una hora o mas tarde. Hoy ha sido un poco caótico este trámite. 

   Por fin estoy dentro del campo del futbol. poco a poco vamos metiéndonos en la pista de atletismo para encarar la salida. Al poquito, y después de los vivas reglamentarios, se da la salida. Estoy bastante atrás y tardo un rato en pasar por la salida.

  Bueno, pues esto ha comenzado. Ya hace bastante calor, lo que hace presagiar que lo vamos a pasar canutas, je je je.

   Tenemos unos tres kilómetros por el pueblo en bajada. Ni plan hoy es terminar, pero si que intento en estos comienzos quitarme el mayor numero de corredores para no pillar mucho tapón. así, me pongo a ritmo maratón y voy pasando a muchísima gente.

  Pasamos por la plaza de toros y por el puente del Tajo. Bajadita y comenzamos a coger los caminos. Los `primeros 5 km, me salen a poco más de 25 minutos. Muy rápido para mis costumbres y para el tipo de prueba que es. Pero  creo que ha merecido la pena por que se puede correr sin mucha aglomeración.


  Voy bastante alegre en un terreno bastante cómodo aunque tiene sus largos repechos que te hacen bajar un poco el ritmo. 

  Así, llego al segundo avituallamiento. Situado en el campo de maniobras de las Navetas. Campo que he pateado de Norte a Sur y de Este a Oeste y al que temíamos ir, ja ja ja. Allí, hablo un rato con el Coronel Paul, Jefe del 4º Tercio y que fue mi teniente en su época. También estuve bajo sus ordenes en la misión Operación Amanecer destacada en Albania, allá por el 1997.

   Continúo con mi camino, que él lo tiene todo hecho, ja ja ja. Un poco mas adelante me encuentro con montero que está vigilando la carrera. Este tipo fue mi binomio en el periodo de instrucción y con el que he compartido muchos años de Tercio. Un abrazaco y a continuar corriendo.

  He hablado un poco con Susana para ir teniéndola al tanto, aunque me está siguiendo por la aplicación y sabe mis tiempos de paso y por donde voy.

  Camino muy polvoriento y muy laaargo el que tenemos ahora. La verdad es que se hace bastante pesado. además el calor ya empieza a ser agobiante. Pero bueno, continuamos con la marcheta y por fin cogemos el asfalto que va picando para abajo para llegar a Arriate.

  Mucha animación en el pueblo que te da un poco de energía. Energía para afrontar el cuestón de hormigón rallado que tenemos de menú en el km 24. 

  En el avituallamiento del cortijo del Marqués, en el km 25, paro para hidratarme bien. Parece que el gemelo derecho se quiere quejar. Me tomo un par de sales y una glucosa.  Me mojo un poco la gorra y los brazos y continúo la subida que tiene unos 4 km más de distancia.

   Uff, tengo que aflojar bastante que si no me va a dar un calambre que me va a dejar seco. Hay que disminuir la marcha y continuar hidratándose para que esta situación remita. Voy también un poco acalorado. Creo que los primeros kilómetros a esos ritmos, me están pasando factura ahora.

  Me pasa Carmen que va como un tiro. La saludo y la deseo suerte. Yo por mi parte sigo controlando mucho el paso. Voy concentrado en reponer líquidos poco a poco para tampoco pasarme.

  Y por fin llego arriba del todo donde está el cortijo Polear y donde tenemos un nuevo avituallamiento. Vuelvo a rellenar los bidones. uno con agua y otro con isotónico. Parece que poco a poco se me va pasando esa sensación y puedo volver a correr con un poco de normalidad.

  Hasta Alcalá del Valle, situado en el km 42, tenemos bastante terreno favorable donde consigo enlazar muchos kilómetros a ritmo cómodo pero bastante bueno.

  Allí, vuelvo a reponer líquidos. la verdad es que estoy comiendo poco. así que saco un sándwich que llevo en la mochila y me como la mitad. Me sienta de lujo. Así salgo del pueblo con la mirada puesta en Setenil de las Bodegas. 

  Ocho kilómetros de camino donde el sol sigue castigándonos de lo lindo. No hay ni una sola sombra. Son caminos de tierra blanca, polvorienta que va haciendo mella en los corredores. Muchos ya van estirando cuádriceps, gemelos y demás músculos. Llevamos más de cinco horas de carrera y el cuerpo se va quejando.

  Y por fin después de rematar estos ocho kilómetros y otro avituallamiento en la mitad, llego a Setenil. Increíble el ambientazo que hay aquí. Si te dejas llevar, te pones a 3 minutos el kilómetro, ja ja ja.

  Muchísima gente animando y disfrutando de este magnifico y pintoresco pueblo. Merece mucho la pena venir a visitarlo.

   Pues nada, a la salida del pueblo, en el complejo deportivo, tenemos el avituallamiento. Aquí me pego una ducha en el grifo de agua para bajar un poco la temperatura. Relleno bidones y cojo unas onzas de chocolate para endulzar el momento.

  En este punto está el punto de vida. Punto donde te podían traer una mochila con lo que tu quisieras. También en el km70 podías dejar otra mochila. Yo hoy he decidido no dejar ninguna mochila en ningún punto. Ha sido un poco arriesgado, pero nunca he necesitado de ellas en todas las carreras que he hecho. Bueno, hoy he tomado esa decisión y espero no cagarla.

  Al salir de aquí, me encuentro con Bernabé. Otro compi de mis tiempos legionarios que hoy lleva la bici acompañando al primer equipo femenino. Charlo un `poquito con él y a por la otra mitad de la carrera. Estamos en el km 50 y llevo seis horas justas. No está mal la cosa. después del bajón y el calambre, parece que me he recuperado bastante bien.

   Desde aquí hasta el km 62, todo para arriba. Tramos mas llevaderos, pero otros bastante exigentes. Bueno, pasito a paso se va haciendo camino y al llegar a lo más alto, me dispongo a hacer la bajada de unos tres kilómetros. 

   Bajada super pronunciada que te va castigando los cuádriceps de mala manera. Intento no sujetar mucho e ir suelto, pero hay que frenar que si no bajamos rodando. Lo bueno es que desde aquí ya se ve el cuartel. Cuartel en el que pasé 8 años de mi vida, ja ja ja.

  Un par de kilometrillos de terreno mas o menos favorable para cruzar la vía del tren y comenzar a correr hacia la entrada del cuartel. Muchísima gente aquí animando y esperando el paso de sus familiares. Todos te aplauden y animan sin parar. Así da gusto correr, ja ja ja.


  Y ahora sí, entro al cuartel y llego al avituallamiento de agua e isotónico donde está Nico. Otro compi de aquellos maravillosos años. Relleno los bidones y bebo un poco mientras charlo con él. Y aparece de nuevo Bernabé con la bicicleta. Menudo paso tienen que llevar las chicas  que van primeras por equipo.

  Pues nada, con ellos estoy un rato, pero sintiéndolo mucho me tengo que ir, ja ja ja. Después de una fotillo me despido de ellos para dirigirme al comedor donde esta el avituallamiento con comida caliente. Yo solo paso para saludar a cuatro compis, también de esa época, y charlar un rato con ellos.

   Uff, que rápido pasa el tiempo. Estoy muy agusto, pero tengo que continuar que quiero terminar lo antes posible, je je je. Gracias por todo compañeros. Hasta la próxima. Aquí tenemos el camión con las bolsas de vida, donde tampoco he dejado nada, ja ja ja.

  Y por último, al paso por mi antigua compañía. La gloriosa segunda, tengo a Pachi esperándome para saludarme. Unas últimas indicaciones de lo que me queda, que me van a venir de lujo. Un abrazo, foto y a seguir dando cera al cuerpo. Gracias por las camisetas, arraclán. Nos vemos pronto, seguro.

  Termino de subir la cuesta que tantas y tantas veces he hecho corriendo, desfilando y castigado, ja ja ja. Salgo del cuartel y en la cabeza llevo rematar estos 30 km dando todo lo que tengo. He descansado un poco aquí en el cuartel, así que ahora a darle estopa.

  Una cosa que no he dicho, es que las zapas me están funcionando de lujo. Hace una semana tenía pensado correr con las Brooks Caldera. Una zapatilla super cómoda que para este terreno va genial. Pero en la última tirada del domingo pasado, llegué con dos ampollas en cada pie. Joder, que dilema. He hecho con ellas otras carreras y me han ido de lujo, pero ahora tengo mis dudas. Pues al final decido dejarlas en Toledo y llevarme las Brooks Cascadia y las Brooks Ghost. Allí decidiré cual ponerme.

   Pues, me la juego y decido ponerme las Ghost. Me van de lujo en asfalto y por sendas, que es lo que he tenido hasta ahora. Veremos a partir de aquí cuando tengamos un terreno mas roto y suelto como me funcionan. De momento van como un guante y espero que sigan así hasta la meta.

  Pues nada, comenzamos a bajar pegados al cuartel hasta llegar al paso inferior de la vía del tren. Allí varios vehículos están cargados con bicis y ciclistas. Mala suerte que espero. Espero que el año que viene se quiten la espinita.

   Pues nada, a por la subida de la ermita. Llevamos ya 75 km y las piernas siguen avisando. Llevo los cuádriceps bastante doloridos, que en las bajadas me dejan tocado, pero que en las subidas ni una molestia. Así, cojo mi marcheta para arriba y a ritmo voy cogiendo a algún corredor que otro.

  Esta carrera la he hecho otros años y veo que en estas posiciones delanteras, vamos los corredores muy separados en comparación con ir mas atrás, que siempre vas con grupos numerosos de marchadores.

  Paso por la ermita y comienzo la bajada a Montejaque. Junto con otro corredor que es de Montoro, voy charlando para que se nos haga más ameno. Ya en el pueblo y después de una bajada en zetas empedradas que terminan de rematar mis piernas, llego al avituallamiento. Me mojo medio cuerpo y vuelvo a reponer líquidos. Sigo sin descuidar la toma de sales para no volver a tener problemas de calambres.

  Y ahora viene lo bueno. La vuelta al monte Hacho. Una vuelta de unos 5 km donde tenemos la subida por el pueblo y que te vas cruzando con los que ya vienen con ella hecha. Nada, A ritmo  y sin mirar atrás. Dejo la carretera para comenzar la vuelta ya por camino y senda. Aquí me encuentro a un ciclista que está subiendo con la bici andando. Ha tenido unos problemillas y está intentando terminar la carrera. Charlamos un poquillo, mientras le vamos sobrepasando. Seguramente luego en la bajada nos de la pasada el a nosotros.

  Comenzamos la bajada. Muy pronunciada como todas las del recorrido. Voy con mucho tiento por que a cada paso el cuádriceps duele, ja ja ja. Pero tampoco tengo que ir tan mal, porque a media bajada, adelanto a un corredor bajando de espaldas. Dice que imposible aguantar la bajada. Pues nada, es lo que hay. Poco a poco hasta el fianal.

  Y... por fin vuelvo a coger la carretera. Pero esta vez, a los que me cruzo les queda dar la vuelta al monte. Como cambia el cuento, ja ja ja. Alguno al cruzarnos, nos dicen que que suerte que ya estamos de vuelta. Ufff, es que vaya vueltecita, je je je.





   Nosotros dejamos el pueblo y continuamos bajando hasta la estación de Benaojan. Aquí de nuevo un avituallamiento. Una palmera de chocolate hace las delicias de mi paladar. Y con 87 km a la buchaca, comenzamos los últimos 15  km. 

  Pero todavía queda una fuerte subida en la que ya llevamos el sol muy bajito. Poco a poco y junto con otro corredor terminamos este tramo de subida. Vamos mirando al cielo y dudamos si llegaremos con luz suficiente para no tener que sacar el frontal.

  Diez km para meta. Son caminos de tierra blanca, pero todavía nos queda un terreno de sube y bajas que nos va a retrasar bastante. No creo que lleguemos sin tener que sacar el frontal.

   Yo voy haciendo cálculos y veo la posibilidad de bajar de 13 horas. Ahora pienso en los 45 minutos que he estado cascando con mis compis de batallas. Pero no los cambio por nada. Ha sido una satisfacción muy grande poder compartir con ellos esos momentos. Pero voy a intentar darlo todo para bajar de esas 13 horas.

  Voy corriendo bastante suelto y empujando con todo en esos repechos del camino. Paso por el último avituallamiento. Voy con algo de líquido, pero decido parar a rellenar rápidamente, no vayamos a liarla al final.

  Y... nada, hay que sacar el frontal. Voy con muy poquita luz y he tropezado dos veces. Así que me paro, me quito la mochila y saco el frontal. Me vuelvo a poner todo y a correr. Pero no se que pasa que el frontal alumbra muy poco y no veo nada.  Pies nada, hago la misma operación que antes y saco las pilas de repuesto. Se me caen al suelo, las busco, las encuentro, no veo un pijo y por fin logro ponerlas.

  Joder, ahora si que veo la luz, ja ja ja. Aprovecho este parón para avisar a mis compis César e Iván que me quedan 5 km. También hago lo mismo con Susana. Bueno a ella la he llamado en varias ocasiones para contarla un poco sensaciones.

  Pues allí arriba está Ronda. Con su majestuoso Tajo. Todo iluminado. Es una pasada para la vista. Y viendo esta estampa, me planto en la Hidroeléctrica. A partir de aquí toca subir y subir hasta enganchar con la cuesta del Cachondeo. Una última subida empedrada que lleva ese nombre tan peculiar. por que será, ja ja ja.

  Y... Por fin piso las calles de Ronda. Nada, miro el reloj y casi estoy en 13 horas. El frontal, las pilas y las piernas, me han hecho perder estos 5 minutitos que me van a hacer falta. Pero voy a disfrutar este kilómetro como nunca. No tengo a nadie delante y no me siguen tampoco, así que todos los aplausos para mi solito. 

  Son las diez y media y está Ronda a rebosar. Que de aplausos. Que de gritos de ánimo. Que emocionante es esto. Voy con una zancada que ni en los primeros kilómetros. 

  Y encaro la cuesta arriba que da acceso a la Alameda. Llenito de gente. Los aplaudo dándoles las gracias. Esto es una pasada. Y allí están mis compis gritándome. Animándome. ¡Que pelotas tienes!, me grita Iván, ja ja ja. Me acerco a ellos y les choco la mano. 

  Ahora sí, giro y entro en el parque. Allí está el arco de meta. Esperándome después de 13 horas y 6 minutos. No soy de tirarme flores, pero carrerón me he marcado. Me cuelgan la medalla que tanto ha costado.


  Foto para el recuerdo y otra muesca apara el marfil. Por allí aparecen César e Iván con los que me doy un señor abrazo. Por mí y por ellos, que también se han marcado una señora carrera. Los tres con el objetivo cumplido. Los tres con la medalla en el pescuezo. Otra edición que no nos tienen que contar.


  Llamo a Susana que ya ha visto por la aplicación que he llegado a meta y el tiempo que he hecho. Como siempre, se alegra casi más que yo de la carrera. Además hoy sabe que el tiempo ha sido muy bueno y mas con el día que nos ha tocado luchar.




 


    Al final 13 horas y 6 minutos. Tiempazo para mí, que no me imagina poder hacer. Contentísimo de mi 228 posición de la general y el 16 de mi categoría. Esta carrera me ha demostrado que tengo que creer mas en mi, aunque mi filosofía ya sabéis cual es....Disfrutar a tope.



  Pues nada, andando y para soltar piernas, nos vamos a cenar. No es que me entre mucho por que estoy hinchado de beber, pero algo hay meter algo aunque no apetezca.

  Recojo la sudadera por haber terminado, guarreamos un poco la comida mientras mis compis me acompañan con una cervecita, que ellos ya han cenado antes. Aprovechamos para contarnos muchas anécdotas del día. 

  Pues nada, esto ha llegado a su fin. Nos vamos para el hotel a descansar para poder salir mañana temprano para casita.

  Solo puedo agradeceros los mensajes de ánimo y de felicitaciones. Mil gracias. Sois geniales. Besos y abrazos.


    Capi

   


sábado, 6 de abril de 2024

Maratón ultra Sierra nevada.

    Otro año, y van cuatro, que nos desplazamos a Granada para disputar el maratón que está dentro del ultra de Sierra Nevada. Fue el primer maratón que hizo Susana y nos gusta mucho, así que si podemos queremos venir cada año a disfrutarle-sufrirle.

   Ya en Granada, nos vamos a directos a Cenes de la vega. Allí tenemos la recogida de dorsales. Además, es el punto de partida de nuestra prueba. 

  Allí nos vamos empapando de montaña y disfrutamos un poco de la feria del corredor.


   Unas fotitos en el cartel de la prueba nunca puede faltar.




   












   Después de estar un ratillo por allí y como siempre, recogemos las llaves del apartamento que tenemos en Pradollano.  Carretera y manta y derechos a Pradollano. Alojamiento, cena y preparar lo de mañana. 

   El despertador suena temprano. Ha estado toda lo noche haciendo mucho aire. Y es que aquí dan previsiones de bastante viento. Aunque esperemos que aquí en la meta sea suave, je je je.

   Desayunar y bajar andando al aparcamiento donde un autobús nos llevará a Cenes de la Vega. El viaje de unos 40 minutos bastante tranquilo intentando cerrar los ojos un poco.

  Ya en Cenes, nos da tiempo a tomar un cafetito. Igual que nosotros, está Miguel Heras tomándose otro. Charlamos un rato con él y le preguntamos por su retirada en el gran trail por una torcedura de tobillo. Bueno, a recuperarse y a por la siguiente.

   Susana y yo, rematamos el café y nos vamos a la salida. Quedan poco minutos, pero nos da tiempo a unas fotillos en la salida.


  Pues nada, hay que colocarse en el cajón de salida, pero antes hay que enseñar la manta térmica como material obligatorio.


  En el cajón de salida coincidimos con dos Toledanos con los que charlamos mientras damos los últimos saltitos. Fco Javier y Javier también vienen a "disfrutar" de este maratón que tiene una distancia de 42 km y desnivel positivo de casi 2900 metros.

  Bueno, pues esto da su comienzo. Las primeras zancadas por el pueblo son de ir acoplándose un poco e ir mentalizando al cuerpo de lo que viene.

  Salimos de las calles de Cenes para comenzar este tramo de senderos y caminos que va en constante sube y baja. Varios tramos con subidas duras. No muy largas, pero bastante duras. 

  Tenemos varias zonas donde se forma algo de trafico y tenemos que parar, pero bueno, nos viene hasta bien para bajar pulsaciones de los primeros instantes de las carrera.

   



  Después de este continúo sube y baja, tenemos una larga bajada hasta Dudar. Bajada de tierra muy muy chula.


  Llegamos a Dudar donde tenemos un avituallamiento líquido. Estamos en el km 11,5. 


   Después de rellenar agua, salimos el pueblo. Después de cruzar su rio, comenzamos una subida bastante larga de unos 3 o 4 km. 

  Susana lleva un rato diciéndome que el cuerpo no la responde. No la duele nada, no la pasa nada, pero que no va bien. En principio aminoramos la marcha para ir mas tranquilos. Pero el problema persiste. Hasta que un un momento dado, me dice que le ha bajado la regla de golpe. 

  Bueno, contra eso no se puede luchar. No la duele, pero siente mucha flojera. Vamos a intentar llegar a Pinos Genil donde tenemos un avituallamiento de los buenos y ahí ver que pasa.

  


  En esta subida nos adelantan muchos corredores. Hemos bajado el ritmo bastante. Pero eso es lo de menos. Lo importante es llegar a ese avituallamiento y valorar la situación.

  Después de la subida, tenemos un cresteo donde Susana ha disfrutado mucho en otras ocasiones. Hoy no va del todo bien, pero intenta disfrutarlo a tope.

  Y por fin llegamos a la bajada de Pinos Genil. Una bajada de hormigón  que se hace bastante pesada. Hacemos bastante tramo andando por que parece que se marea un poco. Parece que le está bajando la tensión. 

  Bueno, con tranquilidad que tenemos tiempo de sobra para llegar. Y así, llegamos al km 18,5. Avituallamiento de los buenos. Susana se va al servicio mientras yo relleno bidones y como algo. Menú muy variado el que tenemos aquí, je je je.

  De vuelta Susana, intenta comer y beber para ver si la sube la tensión y el cuerpo la empieza a responder. Lo hacemos tranquilamente y sin prisas. Tenemos margen para descansar y comer con tranquilidad.

  


  Parece que se va recuperando y animando un poco. Pero las dudas le comienzan a surgir.



  Bueno, pues la decisión está tomada. Vamos a continuar el camino. Veremos como se va dando la cosa. A por el siguiente tramo.

  Salimos del pueblo y comenzamos varias subidas mas o menos llevaderas. Hemos comido y bebido y parece que Susana va algo mas animada y con mejores sensaciones.

  


  A mitad de esta subida, Susana me llama. Voy hacia ella y me dice que no. Que no va bien. Que se marea a medida que vamos cogiendo altura. La intento animar lo que puedo, pero la conozco muy muy bien y si me dice que no, es que no. 

  Así que barajamos varias opciones. Estamos a un kilómetro y medio del avituallamiento. Acompañarla hasta allí y luego continuar yo. Quedarme con ella y el año que viene quitarnos la espinita..... Pero ella me dice que tire yo. Que se vuelve al avituallamiento donde está el punto de evacuación.

  Hay muchos corredores que vienen por detrás, así que no estará sola. Me dice que está bien, pero que se conoce el recorrido y no se ve en condiciones de hacer lo que queda como hay que hacerlo. Una decisión muy difícil que la hace aumentar su grandeza como corredora de montaña.

   Después de un rato de indecisión, me despido de ella. Estamos en todo contacto por el móvil hasta que llegue al avituallamiento. Uff, que difícil es separarte de tu compañera de carreras, de vida y de todo. 

  Esos primeros momentos son muy difíciles. Pero imagino la llantina que llevará ella en su regreso al pueblo. "Termina por mí". Pues a ello vamos Mon Amur.

  Susana ya está en el avituallamiento con los voluntarios. Allí coincide con al menos 3 chicas que le han pasado lo mismo. Parece ser que ha habido un cambio de presiones o no se que. El caso es que a la que estaba mala le ha bajado la tensión y la ha dejado sin fuerzas. A parte de la sensación de mareo. 

  Pues nada, ahora con todo ya controlado, comienzo a hacer un poco mi carrera. Llevo 22 km y bastante bien de patas. Así, decido darle un poco de caña para hacer esta segunda parte dándolo casi todo.

  Esto hace que empiece a adelantar a muchos corredores tanto del maratón, del ultra y del trail. Me quedan unos 8 km hasta el siguiente punto. Alguna zona técnica, pero nada exagerado. Eso sí, tenemos las subidas mas duras de la carrera.

   Después de la temida bajada que nos da acceso al pantano, comienzo la senda por el bosque del barranco de las Víboras. Muy chula, pero con repechos que te dejan sin aliento.



  Paro en la fuente natural que hay junto al arrollo y relleno los bidones. A partir de aquí, todo para arriba. Primero por el bosque y ya en terreno abierto, tenemos las llamadas zetas que después de lo que llevamos, se hacen bastante duras.

   Por este tramo, adelanto a bastantes corredores. Muchos de ellos sentados y alguno tumbado tomando aire y descansando un ratitín. Por aquí pega bastante el calor y eso ya va minando.

  Yo las zetas las hago bastante bien. El calor me gusta y lo llevo muy bien y las patas llevan fuerza todavía. Me estoy tomando esto como un entreno exigente y de ahí que vaya adelantando corredores. Alguno de ellos me dice que donde voy, ja ja ja.

   Y de ahí, a Dornajo. Un nuevo avituallamiento. Paro, bebo y como lo justo para salir de najas de allí. Tenemos un tramo de unos 4 km por un camino ancho y bueno con tramos que pican para arriba que nos llevará al jardín botánico.

   Este tramo se vas justo, se hace mu largo y pesado. Pero si llevas patas, puedes correr tranquilo a ritmo. Y eso es lo que hago yo. Cojo ritmo crucero y a disfrutar de este entorno.

  Voy avisando en todo momento a Susana por donde voy. Ella sigue en Pinos Genil, esperando que salga el autobús hacia la meta.

  Yo remato la subida que me lleva al último avituallamiento situado en el botánico. Relleno bidones y a por el último tramo. Tenemos unos 5 kilómetros y medio hasta meta.

  Cogemos la carretera donde también la hago corriendo, y eso que es en subida, ja ja ja. Y por fin la cruzamos y nos metemos en el bosquecillo de la parte alta  de Pradollano. 

   Este tramo me encanta. Tiene algún repecho que otro, pero es una zona espectacular. Algún año la hemos hecho nevada y no te deja indiferente.

  Senderos muy chulos bajo la sombra de los pinos. He hablado con Susana y ya esta de viaje en el autobús hacia la meta. Ahora nos vemos Mon Amur.

  Aquí cojo a mis compis Toledanos que están haciendo un carrerón. Sobre todo Fco Javier que es su primera maratón. Charlo un poco con ellos mientras seguimos disfrutando de esta zona. Ya nos quedan unos 2 kilómetros. 

  Bueno, yo continúo con mi "entreno" y me voy hacia adelante. Ahora los veré en meta. Ánimo chavales.

  Salgo a la carretera y le pongo un audio a Susana para decirla que ya estoy a falta de 1 kilómetro. Y al poquito aparece un autobús pitando. Ja ja ja, veo a Susana en primera fila saludándome. Que alegría verla y saber que voy a tenerla junto a mí entrando en meta.

  Paso por el aparcamiento y allí está esperándome. Mientras me acerco me graba un video. Beso y a correr a mi lado. La digo que pase por meta con migo que bastante lo ha peleado ella también. Esas circunstancias de carrera son una piiiiiiiiii. Si fuera lesión, falta de entreno u otro lance de carrera, pues te jode, pero es parte del juego. Pero lo que les ha pasado hoy a las chicas ha sido un poco injusto. 

  Así, junto a ella, paso por meta completando mi 154 maratón. Sabor agridulce como os podréis imaginar, pero bueno, otra experiencia que la hace mas dura todavía y que hace que tengamos que volver el año que viene.

  


  Saludamos a nuestra amiga Nany. Voluntaria inconfundible e indispensable, en muchas pruebas del panorama andaluz y alguno nacional. Como siempre es un placer verla y compartir ratitos con ella.

  


  Y al poquito entran los Toledanos. Les damos la enhorabuena. Menuda día nos ha hecho. Muchas felicidades compis. 




    Pues nada, solo nos queda ir a por la bolsa del ropero y comer algo en el avituallamiento final. 
  
   Al final no estuvo mal la progresión. Buen entreno para lo que se avecina. 
   Ahora sí, una ducha, ropa limpia y a disfrutar del buen ambiente de Pradollano junto a Mi mon Amur. Muchos comentarios y pensamientos sobre la carrera para desahogarse y cerrar un capitulo que no ha salido como planeábamos. Pero que esto nos hace ser mas fuerte y coger carrerilla para la próxima.
   

    Venga, te invito a unos churritos que nos van a sentar de lujo, je je je.

   Gracias a todos por los ánimos para Susana. Ha sido un día difícil, pero de aprendizaje. Volveremos con mas fuerza, seguro.

    Capi